domingo, 20 de agosto de 2017

La obesidad en nuestros perros




¿Sabías que entre el 40% y el 59% de los perros presentan sobrepeso u obesidad?

Durante muchos años al nombrar la obesidad hablábamos de un trastorno nutricional sin más, restando así importancia a lo que en realidad es. Actualmente  se reconoce como una de las enfermedades médicas más importantes en nuestros animales.

Esto debería hacernos pensar y adoptar medidas urgentes, tanto para concienciar a las personas sobre las causas y consecuencias que el sobrepeso conlleva, como para implementar estrategias efectivas para su prevención y/o tratamiento.

Uno de los principales obstáculos que nos encontramos para implementar un programa de reducción de peso es la falta de conciencia sobre la importancia de la obesidad, la falta o escasa información de su prevención así como la reticencia a reconocer el exceso de peso en nuestro perro.

Se dice que nuestro animal tiene sobrepeso si su peso corporal está un 15% por encima del ideal y se calificaría de obeso si está un 30% por encima del recomendado.

Ahora bien, ¿sabemos que consecuencias pueden producir un exceso de peso en nuestro perro?

La obesidad es un factor de riesgo para distintas enfermedades: 

  • Ortopédicas: osteoartritis, fracturas, rupturas de ligamento cruzado, enfermedad del disco intervertebral, displasia de cadera.

  • Endocrinas: hipotiroidismo, diabetes mellitus, hiperadrenocorticismo.

  • Cardiorrespiratorias: colapso traqueal, efecto sobre función cardíaca y pulmonar.

  • Problemas de piel: existe un mayor calor corporal que produce humedad y puede dar lugar a dermatitis, heridas y hongos.

  • Problemas del tracto urinario: incontinencia, urolitiasis, distocia.

  • Oncológicas: algunos estudios apuntan a una relación entre la obesidad y ciertos tipos de tumor.

  • Otros: riesgos anestésicos, disminución de la capacidad de termorregulación, estrés, ansiedad.

Como veis, son muchas las enfermedades y de gran importancia relacionadas con el exceso de peso, los expertos alertan de que esta enfermedad reduce la esperanza de vida de nuestros perros de manera notable, hasta en dos años dependiendo del perro. 

Muchas personas no son conscientes de lo importante y significativos que son esos kilos de más en nuestros compañeros, estos ejemplos os abrirán los ojos (o eso espero):

  • Un kilo de más para un perro de 4kg equivale a 16 kg de más en una persona de 65kg.

  • Un kg de más en un perro de 10kg equivale a 7 kg de más en una persona de 65kg.

  • Un kg de más en un perro de 25 kg equivale a 3 kg de más en una persona de 65 kg.

Como veis lo que para nosotros muchas veces es una minucia en realidad no lo es para la salud de nuestro amigo que se puede ver gravemente comprometida.

Debería ser sencillo de entender, el exceso de peso se genera cuando el perro consume más calorías de las que requiere. No obstante, hay otros factores que pueden influir en la capacidad del organismo a mantener un peso ideal:

  • Raza: ciertas razas tiene mayor predisposición a aumentar de peso.

  • Genética: la variación individual dentro de una determinada raza también puede predisponer a un fácil aumento de peso por la influencia de determinados genes. 

  • Edad: el envejecimiento aumenta las posibilidades de un aumento de peso en los perros.

  • Género y esterilización: parece ser que las perras tienen una mayor predisposición al aumento de peso así como la esterilización y castración. 


Para empezar a hacer las cosas bien, deberíamos saber si nuestro perro está en su peso ideal. Para ello nuestro veterinario especialista en nutrición averiguará si esto se cumple o no.

Existen varias técnicas para saber si el animal se encuentra en su peso recomendado y si tiene o no exceso de grasa en el organismo. Aquí vamos a nombrar las dos que más se suelen utilizar:

  • Puntaje de condición corporal: método  de carácter subjetivo en el que se utiliza la apariencia y tacto del animal para determinar su condición corporal. Los sistemas más utilizados son los de 5 y 9 puntos.

  • Mediciones morfométricas: se trata de tomar ciertas medidas corporales para incluirlas en una ecuación que nos da el resultado objetivo de la condición corporal del perro. 

Una vez que ya sabemos si nuestro perro está o no en su peso ideal deberíamos calcular los requerimientos energéticos  que necesita teniendo en cuenta lo siguiente: si es un perro adulto, cachorro, o geriátrico, si tiene poco, moderado o alto nivel de actividad física, si tiene alguna enfermedad o es una hembra gestante, etc. Esto es muy importante a la hora de proporcionar el alimento a nuestros animales ya que debemos personalizar su dieta según sus necesidades.

Por último deberíamos saber la densidad energética de los alimentos que damos a nuestros perros para calcular de forma correcta y precisa la cantidad que necesitan. 

Además las recompensas también deberían ser controladas para incluirlas dentro de las raciones diarias de nuestros compañeros de cuatro patas, para no sobrealimentarlos de manera irresponsable y llevarles a aumentar de peso (no deberían representar más del 10% del requerimiento energético diario). Hay otras maneras de premiar y mejorar el vínculo con ellos como puede ser actividades, juegos conjuntos, juguetes, caricias, etc.

Parece una tarea muy difícil pero esto no es así si acudimos a un buen veterinario experto en nutrición que nos calcule, informe  y guíe para hacer las cosas de manera adecuada, hayamos elegido pienso, comida deshidratada o alimentación natural para dar a nuestro perro. Ninguna excluye el que se deba alimentar de una forma correcta adaptada a cada individuo.

Tratamiento para la obesidad

Si nuestro perro efectivamente padece de obesidad o tiene sobrepeso, el veterinario experto en nutrición instaurará un plan de pérdida de peso:

  • Evaluación inicial. Cálculo de peso ideal, porcentaje de grasa, objetivos y pautas de alimentación, así como control del progreso y mantenimiento. 

  • Instaurar nuevos cambios alimentarios. Conseguir la comprensión y  compromiso por parte de la familia.

  • Utilización de comederos lentos, juguetes interactivos, o juegos de siembra con la comida.

  • Plan de ejercicios adecuado al paciente. Número de paseos y tiempo.

  • Incluir un plan de fisioterapia para facilitar la pérdida de peso.



Como decimos siempre es nuestra responsabilidad que nuestro compañero de cuatro patas tenga una vida plena y feliz, y el tema del peso es un aspecto muy importante y a la vez muy descuidado en cuanto a bienestar animal se refiere. 

¡Hagámoslo bien por ellos!

domingo, 13 de agosto de 2017

Quiropráctica Veterinaria





La palabra quiropraxia procede de las palabras griegas “cheir” y “praktikos” que significa “hacer con las manos”.

En la quiropráctica se utilizan técnicas manuales específicas, para detectar complejos de subluxación vertebral, mediante la manipulación del movimiento para posteriormente corregirlos mediante ajustes en lugares determinados, en ángulos concretos y a la velocidad adecuada. 

¿Qué es una subluxación vertebral?

Es el desplazamiento de una articulación fuera de su posición correcta, esto genera una disfunción biomecánica del sistema musculoesquelético alterando el funcionamiento normal del sistema nervioso y originando distintas patologías y disfunciones.

Esto puede causarlo una mal posición de las vertebras, su movimiento anormal, una reducción del rango articular, alteraciones en los tejidos blandos, contracciones musculares, desequilibrios o asimetrías. 

Tipos de subluxación vertebral

  • De tipo estructural: mala posición anatómica o desalineación 
  • De tipo biomecánica: da lugar a alteraciones en el movimiento debido a una fijación de la articulación, deformidad de los discos vertebrales, o laxitud de ligamentos. 
  • De tipo neurológico: se producen alteraciones a nivel espinal. 

Cualquiera de ellas producen cambios compensatorios, el animal acabará moviéndose de la manera que le cueste menos y le produzca menor molestia y estas compensaciones producirán lesiones a largo plazo. 

Tras un examen concienzudo en el que la anamnesis, el estudio estático y dinámico  y una palpación exhaustiva nos den un diagnostico adecuado se procederá a realizar el ajuste quiropráctico (movilizaciones controladas para movilizar las vértebras, restablecer un buen rango de movimiento articular y recuperar el correcto funcionamiento del sistema nervioso). 

Causas de subluxación vertebral

Perros de ciertas razas como los que tienen patas cortas y columna alargada tipo Teckel o Basset Hound, o de raza Bull Dog por sus frecuentes hemivértebras son animales propensos a sufrir de alteraciones en la columna. Otros con predisposición a displasia de cadera como los Labradores, Golden Retrievers o Pastores Alemanes también pueden sufrir de subluxaciones vertebrales debido a los cambios compensatorios que se producen en su cuerpo. 

El sobrepeso y una vida sedentaria son dos motivos que pueden dar lugar a problemas de columna debido al estrés que sufren las articulaciones, y a la falta de musculatura y soporte nutricional de los cartílagos, además las vías nerviosas también se ven comprometidas ya que no se activan de manera regular. 

Animales de competición y sobre todo en deportes de alta intensidad, donde se realizan ejercicios y movimientos que someten a mucha presión las articulaciones tanto de la columna como de las extremidades. 


En animales de edad avanzada es importante la manipulación de la espina dorsal ya que la reducción del ejercicio promueve el que las articulaciones de la columna pierdan flexibilidad.  


Síntomas

Existen gran variedad de síntomas como dolor en cervicales o columna, rigidez, cambios posturales, atrofia muscular, hiperestesia en columna (aumento anormal y doloroso de la sensibilidad táctil), cifosis (curvatura de la columna vertebral), cambios de comportamiento, alteraciones en la coordinación, cambios en la marcha, alteraciones en actividades cotidianas (subirse al sofá, al coche, ponerse a dos patas sobre los cuartos traseros, dificultad al levantarse, etc).

Si quieres informarte más sobre esta técnica tan efectiva te aconsejamos que consultes con un veterinario especialista en quiropráctica. 



Fuente: Manual de fisioterapia en pequeños animales